lunes, 24 de noviembre de 2014

Lima. Un Sábado Más


Por Guillermo Anderson 

La novela  negra de Juan Carrá transcurre tal como dice un tango “En el hondo bajofondo donde el barro se subleva”, prostíbulos, gimnasios clandestinos y cárceles.

Está dividida en Rounds, escrita en lenguaje directo, te sube al ring y te da trompadas. El lector esta solo cuando le quitan el banquito parafraseando al boxeador Ringo Bonavena, del epígrafe inicial.
El titulo remite a que las peleas se organizaban los días sábados y allí Lima despliega toda su guapeza soñando con pelear en el Luna Park mientras pelea en un antro de mala muerte.
Durante la  trama se van conociendo los personajes y la historia de cada uno de ellos. Lima es el personaje principal aunque su madre (Tota)y su pareja (La Negra)tienen  un protagonismo destacado.
Con recursos estilísticos Carrá logra que el lector no pueda dejar de leerla, esquivando piñas arrinconado contra las cuerdas tratando de mantenerse en pie y uno hasta siente el olor a amoníaco que usan para despertar a los peleadores.
Hay un crimen en ese entramado de historias y allí la historia avanza a ritmo vertiginoso, para resolver el enigma del culpable del homicidio, la novela mantiene expectante sin saber que va a pasar a continuación.
Finaliza la novela se respira hondo y luego  silbando algún tango arrabalero.

Notas de degustación: Se recomienda leer escuchando “El barrio en los puños” de Las Pastillas del Abuelo y libro con letras de tango al lado.


martes, 18 de noviembre de 2014

Error de Cálculo Por Gastón Intelisano


Una familia aparece asesinada en su propia casa. Hay puñaladas, hay disparos, hay cuerpos carbonizados. La intimidad de un hogar se ha vuelto pública: se ha transformado en una escena del crimen, en el espacio en el que los especialistas que comanda Santiago Soler buscarán huellas, rastros, indicios que permitan configurar quién llevó a cabo el asesinato y cómo lo hizo.
El crimen, sin embargo, no parece simple de resolver: las víctimas no tenían enemigos aparentes, sino, por el contrario, una reputación intachable, el respeto y la consideración de sus allegados. Además, comienzan a sucederse una serie de secuestros relacionados con el caso, lo que hace que la resolución se vuelva urgente, imperiosa, necesaria: los secuestradores se regodean enviando videos snuff en los que se ve con claridad cómo matan a las mujeres que tienen cautivas.

En medio de esta vertiginosa sucesión de acontecimientos, Santiago Soler deberá unir la meticulosidad y la calma de la ciencia forense con la acción de quien no tiene tiempo de medir consecuencias. El análisis de rastros y las autopsias con las persecuciones y los disparos.
El otro extremo de la piel se llevó hacia atrás, como cuando se da vuelta una media, y entonces apareció el cráneo de un blanco amarillento. Luego, encendieron la sierra eléctrica circular, que emitió un sonido mezcla de torno y taladro. Cuando los dientes de la máquina tocaron el hueso craneal, una nube de polvo blanco flotó en el aire de la sala.
Gastón Intelisano, a través Santiago Soler, personaje y álter ego, con la minuciosidad y precisión de las descripciones, con la inquietante acción a cada página, ha inaugurado un nuevo territorio a explorar en el policial argentino: el cuerpo.

Fuente:http://gintelisano.wix.com/gaston-intelisano