miércoles, 17 de diciembre de 2008

SALUDO DE FIN DE AÑO

LOS QUE HICIMOS TINTA ROJA QUEREMOS DESEAR A TODOS SUS FAMILIARES, AMIGOS Y LOS OYENTES QUE NOS ACOMPAÑARON DURANTE TODAS LAS EMISIONES UNA MUY FELIZ NAVIDAD Y UN PROSPERO AÑO NUEVO.
QUE SE CUMPLAN TODOS SUS DESEOS Y ESPERAMOS ESTAR AL AIRE NUEVAMENTE EL AÑO PROXIMO, DE LO CONTRARIO SEGUIREMOS EN CONTACTO A TRAVES DE ESTA VÍA

EXITOS!!!

jueves, 4 de diciembre de 2008

Crónica policial en el Malvinas






Pico Sanzone, Ricardo Ragendorfer, Ramón Tarruella (moderador) y Carlos Rodríguez.


Los cronistas policiales, en búsqueda de historias ocultas“Las páginas policiales de los diarios son espacios fundamentales para encontrarse con la literatura”, declaró Ricardo Ragendorfer, confesando su gusto por las atmósferas y personajes de ficción que envuelven la crónica policial, donde las anécdotas dan vida a personajes tanto anónimos como poderosos, a relatos inéditos que merodean algunos casos famosos. Las palabras del autor de La Bonaerense dieron comienzo a la charla del jueves pasado en el Centro Cultural Islas Malvinas, dedicada a la crónica policial. Fueron también invitados los periodistas Hipólito “Pico” Sanzone y Carlos Rodríguez, en el segundo encuentro de noviembre.El revés de la trama de importantes casos policiales como el de José Luis Cabezas, Barreda, el soldado Carrasco, Oriel Briant, Belsunce entre otros, resultó ser la gran preocupación de los tres invitados. Ragendorfer compartió sus inquietudes sobre la muerte del cantante Rodrigo: “de a poco fui enterándome el trasfondo, Pesquera huía más de sus delicadas estafas que de una mafia de la bailanta, apropósito inexistente; casi como en un cuento de Patricia Highsmith, los damnificados de esas estafas se iban acumulando en las puertas de los edificios que Pesquera abandonaba, con la mala suerte de haber sido involucrado en un caso tan mediático como el de Rodrigo”.Uno de los integrantes del público les pidió elegir una crónica periodística de importancia en su trayectoria. Carlos Rodríguez contó una anécdota con Daniel “Tractorcito” Cabrera, un importante ladrón de bancos, con quien mantuvo una estrecha relación consumada durante el período de investigación. En la fecha de su cumpleaños lo llamaba desde la cárcel con la intención de ser el primero en saludarlo, “antes que mi madre y mis allegados”, acotó el periodista de Página /12.Ragendorfer ante la misma pregunta optó por “El túnel de los huesos”, la historia sobre una fuga de presos en Devoto. En víspera de la fuga, los presos, iluminados fantasmagóricamente por bombitas de 25 watts, y llenos de polvillo, se toparon con un túnel colmado de restos humanos. Así, “El túnel de los huesos”, publicado en la revista Página/ 30, se transformó en una de las crónicas más emblemáticas de su carrera.“Nadie mata en silencio”, fue la frase inquietante de la noche, en voz de Hipólito “Pico” Sanzone, histórico redactor de policiales del diario El Día. “En cada crimen hay alguien que se queda con las últimas palabras, y el periodismo no tiene acceso a esas palabras”, aclaró, como parte del enigma más hermético de la profesión.Hacia el final del encuentro, los tres invitados coincidieron en la idea de que la ficción supera la realidad con personajes oscuros como Mario Naldi, comisario de “La maldita policía”, que por culpa de Ragendorfer debió vender su costoso yate. O el brutal informante de Carlos Rodríguez, funcionario de un ex-centro clandestino de detención, también de apellido Rodríguez; o De Gastaldi, el comisario que confesó a Pico Sanzone que su fortuna se lo debía a su padre, inventor del “Toddy”, conocido chocolate en polvo.El jueves próximo a las 19.30 hs., la mesa La novela con pólvora y política, el ciclo dedicado al género policial en la ficción y no- ficción cerrará con la presencia de los escritores Juan Sasturain y Ernesto Mallo.
Sofía Silva.




Pico Sanzone, Ricardo Ragendorfer, Ramón Tarruella (moderador) y Carlos Rodríguez.
Publicado por Mil Botellas






Tras los pasos del policial negroJuan Sasturain y Ernesto Mallo participaron de la mesa de Cuatro Ficciones el pasado jueves, compartiendo con el público, ciertas intimidades de sus personajes de ficción. Sasturain precisó para Julio Argentino Etchenique, detective en Manuel de perdedores (1987) y Arena en los zapatos (1989), su aire de policía “piantado”, un personaje local que decide ya anciano, instalar su oficina de investigación en Buenos Aires, y así, aventurarse y ordenar a la vez, los desbarajustes de la ciudad. Mallo aprovechó la ocasión para hablar de Lascano, el comisario por el que procuró que el clima dictatorial de la época lo volviera verosímil. Más tarde “El perro” Lascano, quizás por estrechar la turbia mano del médico forense Fuseli, perderá su protagonismo en Me verás caer, novela a publicarse en marzo del año próximo, un anticipo del autor en el encuentro.Luego de una larga lista de destacados autores policiales, entre ellos Dashiell Hammett, Raymond Chandler, Jim Thompson y también Ernest Hemingway, Sasturain reveló sus influencias y la forma en que prefiere hacer literatura: “yo escribo ficción desde la ficción, jamás investigué antes de escribir, ni me acerqué por ejemplo, a ver de qué se trataba una morgue”, aclaró, describiendo así los detalles y sensaciones capturadas de sus lecturas. Evocó asimismo, las historias de caballería como parte del campo del imaginario, un recurso para crear y dar vida a su personaje, Etchenique. Por su parte, Mallo mostró su interés por la investigación y la necesidad de nutrirse de sucesos reales en el momento de escribir.Antes de enredarse en otra extensa lista de obras y escritores, Sasturain confesó su cercanía a la edad de su detective, “los estoy por alcanzar”. Desde los años setenta en que inició la escritura de novelas policiales hasta ahora, “Etchenique no ha cambiado, pero yo sí”, reflexionó el autor de la nueva novela Pagaría por no verte (2008).A continuación, los invitados conversaron sobre el clima de lectura que gestó toda una generación de escritores argentinos, se refirió a las obras de William Faulkner y las de escritores del policial norteamericano, que centraron su amplia producción desde la década del treinta hasta la del cincuenta, cerrando el prontuario, con El largo adiós (1953) de Raymond Chandler. Aquella lectura voraz del policial fundó en los sesenta a una nueva camada de escritores nacionales. Temas como el poder político y económico, la violencia y el lenguaje de la calle contribuyeron a sus argumentos, en una ciudad llena de crímenes y corrupciones.Mallo agregó: “el gobierno acá nos arroja un material descomunal para escribir”, y memoró una serie de casos policiales como el de José Luis Cabezas, que en la mesa del jueves pasado, dedicada a la crónica periodística, fue uno de los centros de atención.Hubo espacio también para anécdotas personales. Mallo contó la anécdota de la premiación de La aguja en el pajar y la discusión que armó Andrés Rivera, jurado del premio Clarín en el año 2004, para que la novela mencionada obtuviera el primer puesto. Rivera, a pesar de todo, mantuvo su postura ante la disidencia del resto del jurado. Sasturain desató risas al público con la historia efímera del EPA (Escritores Policiales Asociados), a fines de los años ochenta, y que sólo constó con un logo y un único encuentro en el café porteño “La Academia”, en Callao entre Corrientes y Sarmiento. El encuentro fue la excusa para tomar una fotografía con los grandes escritores del género de ese momento, como José Pablo Feinmann, Ricardo Piglia, Osvaldo Soriano y Juan Martini.Hacia el final Juan Sasturain, habló del argumento de su nueva novela y reveló de dónde tomó prestado el título, Pagaría por no verte, de un tango de Celedonio Flores. El autor expuso su entusiasmo con su nuevo libro: “según dicen los amigos, es la mejor que me salió”. También, en compañía de Mallo, jugó a toparse con los “grandes tituleros de la literatura”, trayendo así, a la memoria, títulos impactantes de la literatura universal. Juan Carlos Onetti, Eduardo Mallea y Roberto Fontanarrosa entre otros, fueron los últimos nombres que se oyeron en el Centro Cultural Malvinas.El jueves 4 inicia el ciclo literario del mes de diciembre, dedicado a crónicas del rock, un prócer de la música nacional, Litto Nebbia, presentando su libro Una mirada. Reflexiones & anécdotas de vida.

lunes 17 de noviembre de 2008

Ciclo Cuatro Ficciones
Jueves literarios en el Malvinas. 19, 30 hs.Libros, charlas, debates, escritores.
Noviembre Negro(El género policial en la ficción y no-ficción)


Jueves 20. La novela con pólvora y política: Juan Sasturain y Ernesto Mallo.

Juan Sasturain: Nació en González Chaves en 1945. Escritor, periodista, guionista de historietas. Autor de las novelas "Manual de perdedores I y II" (1985/87), "Arena en los zapatos" (1988), "Los sentidos del agua" (1992), "La lucha continúa" (2002), "Los Galochas, esa gente exagerada" (2007); de los volúmenes de relatos "Zenitram" (1996) y "La mujer ducha" (2001). Ha publicado también libros sobre fútbol y reunió sus poemas en "Carta al Sargento Kirk y otros poemas de ocasión" (2005). Es editor del diario Página/12, dirige la revista Fierro y es conductor del programa "Ver Para Leer", que se emite los domingos por Telefé. Presenta en el ciclo Cuatro Ficciones su última novela: "Pagaría por no verte".

Ernesto Mallo: Nació en La Plata en 1948. Escritor, autor teatral, guionista de cine, conductor radial. Su primera novela "La Aguja en el Pajar" (Planeta, 2006) recibió la Primera Mención del Premio Clarín de Novela 2004 que fue votada para el primer premio por Andrés Rivera en disidencia con el resto del jurado y ganó el Premio Memorial Silverio Cañada 2007 que otorgado durante la celebración de la Semana Negra en Gijón, España. Su segunda novela "Delincuente argentino" (Planeta, 2006), fue finalista del Premio Dashiell Hammett 2008, también en Semana Negra. Acaba de finalizar la novela "Me verás caer" a publicarse en marzo de 2009 y trabaja en "Lo que Dios Manda" su siguiente proyecto novelístico.

Sofía Silva.
Publicada en Diagonales, 23/11/08